Una critica de comunicación

Tomado de: http://concepto.de/que-son-y-cuales-son-los-medios-de-comunicacion/

Esta semana lo ponemos al día con los logros del deporte, hablaremos de dos festivales locales y de los medios que nos brindan la información. Mucha atención…

En materia de deporte, el ciclismo sigue dando frutos nacionales e internacionales y no solo a nivel local, sino Colombia entera se ve en puesta en alto en este deporte. Esto se demuestra con el reconocimiento de los ciclistas Carlos Ramírez y Cristina Sabrina, los cuales han triunfado en sus categorías. Cristina al quedar de primera en la cuarta etapa, lleva la delantera en Tour femenino 2017 y Carlos se llevó un doble triunfo en la copa Latinoamericana de BMX. En este ámbito, como grupo seguimos la discusión del porqué de la popularidad de una deporte sobre otro, creando una nueva perspectiva con nuevas incógnitas sobre el porque incluso dentro de un mismo deporte hay ramas que ganan más popularidad que otras; hablando específicamente del ciclismo diferenciando el ciclismo deTour y montaña a diferencia del BMX que aún nombrado no es tan famoso en medios sociales. De esta manera se busca que el lector analice y vea más alla del triunfo y el reconocimiento, como abre bocas para lo que sera la proxima publicación.

Por otra parte, esta semana comenzaremos comentando lo que sucedio en Ópera al parque, el festival que alcanza su edición número 20. Se puede decir que este festival está “a mitad de camino”, y debemos ser enfáticos en la falta de promoción que tiene el evento, junto a otros tantos de los que les hemos hablado en blogs pasados, por lo tanto se observa una falta de información y comunicación hacia los capitalinos. El festival comenzó el 13 de octubre, y para traer un poco a tierra las cosas, el evento se perfila como una de las propuestas distritales más fuertes, para promover la integración social y la aportación a la cultura capitalina. No sólo eso, el evento también ha brindado desde hace algunos años, la oportunidad para la producción escénica y lírica a las universidades, que en esta edición tienen la oportunidad de mostrar sus propuestas.

El problema que como grupo hemos encontrado es un problema de comunicación, ya que la asistencia a estos eventos es mínima por la falta de información y conocimiento respecto a a fecha y cronogramas de estos eventos organizados por la alcaldía, es un deber manifestarle a usted como lector la necesidad de reconocer estos espacios como verdaderos ejes de construcción cultural y social. Ya han pasado 20 años, en los que la afluencia de personas no ha sido grande comparada con otros eventos distritales (10.000 personas en veinte años (Alcaldía mayor de Bogotá, 2017)).

Esperemos que en próximas ocasiones sea más fácil enterarnos de eventos como este de opera. Por el momento, quedan 6 días para que el festival termine. Aquí le dejamos la programación por si se interesa.

Por supuesto, sabemos que muchas veces el ciudadano no dispone de tiempo para acercarse a estos eventos, y no lo culpamos. Pero si le interesa leer un poco, ya están habilitadas algunas biblioestaciones en algunos portales de transmilenio. Se trata de zonas de préstamo de libros; este proyecto empieza “con pie derecho” ya que ya hay  más de 28.400 mujeres y más de 24.000 hombres inscritos al programa. A nuestro parecer este hecho deja un proyecto que si funciona se debe de aplaudir y apoyar, ya que la lectura es un factor importante que en una ciudad tan agitada como es la capital. Tal vez, al detenernos un poco, leer un rato y abrir nuestras perspectivas de la realidad, podamos tener menores niveles de estrés así como una mirada diferente de la ciudad.  

Por otro lado, Hip Hop al parque, en esta edición Número XXI, comienza con una serie de conferencias encaminadas a mostrar el componente histórico e ideológico que configura la escena musical y artística en la ciudad de Bogotá. A un día del festival, puede consultar la programación y artistas relacionados aquí, si le resulta de interés.. Ahora es momento de una reflexión por parte nuestra, para usted como lector, y esperamos considere como válido el siguiente punto de vista. Tal vez haya visto este vídeo, en el que jóvenes raperos son insultados por una mujer. Esto fue parte de un experimento social para poner en evidencia el prejuicio de la gente respecto a grupos urbanos y las expresiones musicales del género del rap. No es un secreto que el tema del Hip Hop, el rap y la opinión que se tiene respecto a sus exponentes es controvertido. Quien estuviera por primera vez en un evento com Hip Hop al parque sin estar familiarizado se llevaría un asombro tremendo, tal vez hasta juzgaría de peligroso el ambiente por su público. Lo cierto es, que para ese público, y para los artistas, el evento muestra lo mejor de lo mejor: Es la cumbre más alta de la escena local.

Pero fuera del festival, allá en las calles, hay un movimiento bien interesante, que reúne a muchos jóvenes, tal vez más de lo que se pudiera pensar en un primer momento. Jóvenes con aspiraciones de llegar a tocar la tarima así como lo hacen sus ídolos. Esos mismos, que comienzan de lo básico, o de lo más bajo, compitiendo una y otra vez, mejorando y buscando el reconocimiento desde lo mínimo. Comenzando por ejemplo, en las Galleras, reuniones semanales donde aficionados y profesionales se reúnen a competir, apoyados por un público variado y en ocasiones diferente.

Pero en el caso del rap, no es una cosa simplemente de aficionados, o desocupados, como podría pensarse. Tanto los artistas como los espectadores, comprenden que el rap es un componente de identidad fuerte, que surge muchas veces de los problemas sociales y del conflicto pujante en los sectores y barrios deprimidos. No son simplemente improvisaciones, son parte de un propósito crucial, y es el hacerse oír. Sus letras son capaces de cargarse de mensajes protesta mucho más eficaces que cualquier chala mediática.Son parte de un contexto muchas veces difícil, pero que a veces, nadie conoce como ellos, y son capaces de representarlo en letras admirables. Mire esto, por ejemplo. El rap en las calles, junto con el Hip Hop (y el breakdance asociado), son, tanto una forma de poner en evidencia los conflictos sociales, como una oportunidad de integrar y de hacer notar a sus comunidades. Como propuesta distrital, grupos como idartes, o algunos promotores independientes, han hecho una labor admirable, en el apoyo de estas expresiones como un medio de integración social.

Haría falta más espacio para poder abordar mejor este tema, pero queremos que se quede con la idea de que estos grupos son un gran aporte a la construcción identitaria en muchas partes.

Para finalizar esta entrada queremos hacer un comentario a los medios que nos suministran la información, especialmente esta semana. Primeramente, nuestra crítica en anteriores ocasiones ha apuntado a la responsabilidad de los medios, especialmente aquellos que tienen secciones dedicadas a las noticias de nuestra ciudad, de incentivar el interés en la práctica del deporte, y la divulgación de los logros juveniles a nivel distrital y nacional. Y retomamos esta postura. Pues en ámbito de cultura, los medios generalmente no defraudan, siempre se está hablando por lo menos un poco de eventos y propuestas a nivel distrital. Muchas de ellas están en el ojo de la crítica nacional e internacional. Pero bien sabido es que el deporte es una parte clave. Y creemos que los medios, tanto virtuales como televisivos y radiales juzgan la información que divulgan p a conveniencia. Cuántos premios no estaban ganando los deportistas juveniles en países como China o Perú, que no obtuvieron mención por medios como el Tiempo, o independientes como Las 2 Orillas, que en varias ocasiones destacan aspectos positivos de la ciudad, es cierto, pero dejan este tema a un lado. Así, los institutos distritales son los únicos que pueden dar a conocer esos logros. No se trata de hipocresía en los medios, sino de generar un espacio más amigable con estos escenarios.

Por otro lado, Hip Hop al parque terminó con algunas riñas, lo que sirvió para despertar las críticas de los medios. Y es que algunos revelan su incongruencia, como Caracol, que, mientras en redes divulga videos para atraer críticas negativas al evento, en televisión intenta tomar una postura responsable, y crítica, buscando las fallas en el evento y posibles soluciones. Esta escena se repitió en otros medios. Pero lo cierto es que de alguna forma, todos logran abordar críticamente, al menos por hipocresía, una visión bien desarrollada del problema. Que el evento tuvo fallas en cuestión de seguridad, que falta cultura, y una mejor comprensión del contexto social de los asistentes, todos esos son puntos acertados para construir una crítica, como lo hizo El espectador. La crítica aquí es a Idartes, y al distrito, que se ha negado a pronunciarse sobre estos fallos, mientras en las redes comunica que el evento fue “Todo un éxito".